Venezuela se cundió de zombies

"Intensa y entretenida. Un aporte al desarrollo del cine venezolano como industria"

La ópera prima venezolana del aragueño Flavio Pedota nos sumerge en una Venezuela caótica, infectada de seres agresivos y caníbales, resultado de un virus desconocido que se está propagando por toda la región. En medio de esta problemática, el doctor Adam Vargas debe emprender un complicado viaje a lo largo del país para salvar a su pequeño hijo antes de que sea demasiado tarde.

Al ver los diversos enfrentamientos que se están generando desde hace algunas semanas en casi toda Sudamérica, he llegado a pensar que la idea de Flavio no es tan descabellada. Ahora bien ¿En este caso cual será el epicentro de los disturbios sociales?

Lo cierto es que mediante una combinación entre Zombieland, The Walking Death y Guerra Mundial Z, sumado al talento y esfuerzo de Flavio, llega la primera película venezolana de zombies, consolidando con buenos ojos al cine de género en nuestras regiones ¿Cómo me pareció? ¡Acompáñame a leer esta nueva reseña!

No es una indirecta, es directa

Esta película es una crítica hacia la política revolucionaria, cuyos efectos han causado una crisis humanitaria en Venezuela, según la opinión de muchos. De igual forma, Flavio refleja la emigración de los venezolanos que huyen de la "Infección" como un problema que podría expandir el canibalismo y la violencia descontrolada a los demás países.

Es importante acotar que el virus se origina porque un ruso se contagió de rabia mientras estaba bajo los efectos de la droga Krokodil ¿Quizás es otro mensaje subliminal para decirnos de donde viene todo esto? En este caso, Flavio parte de una premisa que va en contra del exterminio, por lo tanto, el virus tiene cura y su búsqueda será la prioridad de algunos personajes.

Entre planos bien creativos, tomados de locaciones reales de nuestra hermosa Venezuela, algunos audios y una que otra línea del guion, podemos casi afirmar que esta película le habla directamente a los políticos venezolanos.

Por su parte, la estructura narrativa de esta road movie es bastante entretenida y prácticamente no deja espacio para el aburrimiento ya que en todo momento hay un tiroteo, una persecución o incluso los típicos momentos de suspenso en los cuales debes estar alerto ante cualquier ataque zombie.

Sin embargo, el climax y sobretodo el final de la película se sienten apresurados; quizás sea porque agregaron una escena dramática, con una duración relativamente considerable, la cual no encajó en una película que iba a mil por hora, pues, esto bajó las velocidades y le restó ritmo a un desenlace que pudo ser más dinámico.

Aplausos a la cinematografía

En los primeros 5 minutos de la cinta (incluyendo el polémico plano de entrada) apreciaremos la magestuosidad que contiene esta película a nivel fotográfico ¡Sencillamente espectacular!

También es de aplaudir el concepto de dirección y la estética, semejante a la de un videojuego, no visto antes en otras producciones venezolanas. Por ejemplo, en una secuencia el protagonista se encuentra "atrapado" dentro de un edificio colmado de zombies, por lo que en cada esquina éste se detiene a observar el panorama, cual juego de Resident Evil o incluso de shooter. Sin duda, "Infección" es una película altamente comercializable y expandible a otras industrias.

Otro aspecto a resaltar dentro del magnífico trabajo de producción fue el maquillaje, un elemento que aportó muchísimo en términos generales, sobretodo, a la caracterización de los zombies, de lo mejor que tiene esta película.

¡Corran que hay vienen!

Definitivamente debo comenzar comentando el trabajo realizado por los "extras" de esta película, los cuales de extras no tienen nada. Excelente caracterización, desde los gruñidos, la manera de correr y hasta las actitudes en su modo pasivo ¡Dignos de un zombie!

Ellos giran en torno a un elenco de talla nacional e internacional, cuyas actuaciones fueron correctas pero no terminan de conectar con el público; al fin y al cabo cualquiera podría convertirse en zombie ya que el objetivo de la historia va más allá que enfocarse solamente en una persona. 

Algunos nombres conocidos como Leonidas Urbina y la bella Ananda Troconis (a quien me hubiese gustado ver mayor tiempo en pantalla) en un rol valiente y arriesgado. Destaco las actuaciones de la primera actriz Francis Rueda, el maestro Annibal Grunn y el talento de la australiana Genna Channel Hayes, cuyas interpretaciones se acoplaron muy bien al rol de su personaje.

Ahora bien, el protagonista de la cinta es interpretado por Rubén Guevara, quien servirá de colirio para las chicas, pero sin restarle mérito, pareciera que su trabajo no está a la altura de lo que muchos esperaban ver desde el punto de vista cinematográfico; un héroe digno de este tipo de películas. También se le suma una escena dramática en la que no genera empatía con los espectadores (tal vez por el motivo explicado anteriormente). Entendemos que sólo es un doctor, pero con mucho respeto, en ese aspecto debemos seguir aprendiendo de los hollywoodenses, quienes son expertos en sacar petróleo hasta del personaje más cotidiano de todos.

Por su parte, los militares también están muy bien represantados actoralmente... ¡Siempre y cuando no los mezclen con una patrulla de la policía!

En resumen

Una película que reivindica al cine venezolano como industria cinematográfica de producciones comerciales.

Esperemos que finalmente se haga justicia, otorgándosele la permisología de registro como obra nacional venezolana, para que así todos puedan disfrutar en pantalla grande de una obra de gran calidad cinematográfica.