El poder de la naturaleza canina

EL LLAMADO SALVAJE

"Hermosa adaptación que trata la evolución personal a través de los ojos de un perro"

Este drama canino narra la historia de Buck, un perro mimado que es raptado como activo valioso para ser comercializado en el Yukón canadiense, en la década de 1890. A partir de ese momento, la vida de Buck toma un nuevo rumbo, embarcándose en una aventura donde aprenderá a defenderse como un animal libre, descubriendo nuevos mundos y atendiendo al llamado salvaje de la naturaleza.

Es importante aclarar que esta entrega se basa en una novela clásica que ha sido adaptada varias veces al cine, lo que quiere decir que algo bueno tiene. Específicamente, esta cinta se percibe bastante familiar, emocionante, algo conmovedora y realza la importancia de los animales en diversos ámbitos, aumentando en los espectadores el amor hacia sus mascotas.

La historia

El argumento general de la historia se divide en dos partes; la primera aborda el vínculo animal doméstico-hombre y la segunda el vínculo de coexistencia entre un animal libre, el hombre y la naturaleza salvaje. Sin embargo, la historia general, las subtramas y el desarrollo de las secuencias giran en torno a Buck, protagonista absoluto de la película.

En ese sentido, la figura humana queda relegada a un segundo plano, con un par de actuaciones co-protagónicas (una para cada mitad de la película) que sirven de apoyo para el desarrollo de la historia.

Por su parte, esta cinta nos muestra desde los primeros minutos que Buck es un perro que evidentemente no pertenece al sitio donde se encuentra, por lo tanto, debe pasar por un proceso de evolución para descubrirse y encontrar su lugar en el mundo, bien sea, como animal libre o como mascota.

Este proceso podría interpretarse como parte del sacrificio que muchos deben hacer para salir de su zona de confort (muchas veces en contra de su voluntad) y alcanzar un destino que va mucho más allá del conformismo perezoso. 

Este difícil viaje estará lleno de adversidades en donde las emociones comenzarán a aparecer, por lo que Buck representa y porque a nadie le gusta ver sufrir a un perrito que ha sido maltratado tanto por el hombre como por los de su propia especie. Definitivamente, la cinta muestra una vez más que el amor de un perro es incomparable frente al de cualquier ser humano.

Lo mejor del guion es que fluye al ritmo de la nieve y atrapa al espectador en una historia que no necesita apoyarse en discursos rebuscados para transmitir algunos mensajes elementales, como el amor que debemos sentir hacia los animales. Asimismo, contiene momentos dramáticos y emotivos pero también algunas escenas dulces e inocentes, convirtiéndola en una película disfrutable para toda la familia.

Aspectos técnicos

A diferencia de lo que han considerado la mayoría de mis colegas, en mi humilde y sincera opinión, el CGI exagerado de Buck fue necesario para reforzar la personalidad de un perro que puede llegar a percibirse como si fuera una especie evolucionada. Particularmente, esta característica no me impidió empatizar con el personaje, más allá de la poca credibilidad que transmite.

Evidentemente la calidad de sus efectos visuales no se igualan a los Live-Actions de Disney, sin embargo, considero que los gestos aplicados a Buck hicieron falta en personajes de "El Libro de la Selva" o "El Rey León", los cuales no transmitieron las mismas emociones de este perro, a pesar del realismo en sus animaciones. Debemos entender que desde que la casa del ratón nos acostumbró a ver este tipo de películas, nos costará adaptarnos a diferentes propuestas de CGI.

Ahora bien, al resaltar los aspectos varios que contribuyen positivamente a "El llamado salvaje", debo reconocer los elementos técnicos y artísticos que generan una atmósfera agradable en medio de la naturaleza, opacando todas las falencias del CGI en sus personajes y escenarios, con el uso de las populares pantallas verdes.

La fotografía, su palestra de colores y la banda sonora resaltan impecablemente la belleza de una producción donde los paisajes juegan un papel muy importante.

Los personajes

Buck es indiscutiblemente un superhéroe canino, a pesar de que la película es "realista". Sus valientes hazañas heroicas complementadas con una fuerza descomunal lo convierten en el más querido por todos, el galán de galanes, "el matador" como dirían coloquialmente. Como pocas veces se ha visto en la gran pantalla, este perro se monta la película en el lomo a lo Supercan y le roba el show a los otros personajes ¿Lo irónico? Que no existe, es una animación.

Por tales razones, Buck se gana el respeto de una jauría que lo aprecia como su líder. De igual forma, en "El llamado salvaje" aparecen tres personajes humanos que puntualmente cumplen su rol.

El primero de ellos es Omar Sy, quien interpreta en la primera mitad de la película a un cartero encargado de transportar el correo por los inhóspitos caminos del Yukón canadiense. Para ello deberá arrear a una jauría de canes, a quienes aprecia mucho (hasta cierto punto). Este personaje es quien le abre los sentidos a Buck y la interpretación de este gran actor es muy fresca, transparente y con un alto sentido del humor, aportándole momentos agradables a la cinta cuando más lo necesita.

¿Te extrañaba la ausencia de Harrison Ford? Entra en acción a partir de la segunda mitad aunque está presente desde el principio de la película ¿No tiene sentido? Anda a verla y sabrás a qué me refiero.

Como si no existieran otros roles para este actor, acá interpreta nuevamente a un personaje solitario que establece una gran amistad con un personaje peludo, el cual lo ayudará en sus momentos depresivos. Como punto a favor, adopta a Buck en su mejor momento como perro libre, lo importante del personaje es la reflexión que deja en los espectadores acerca de considerar a un perro como una simple mascota o como un amigo verdadero ¡Un papel indicado para el querido Ford!

Por último, un rol que debería ser fundamental en cualquier película, no cumple su función en esta. Dan Stevens interpreta al villano de la cinta a través de una actuación extremadamente exagerada y caricaturesca, desmotrando que el hecho de haber interpretado a la Bestia en el Live-Action de Disney, no significa que pueda ser intimidante en todos sus papeles, al contrario, su rol en "El Llamado Salvaje" vuelve predecible la trama y le resta sentimiento a las escenas.

En resumen

Esta película impactará a muchos espectadores, aumentando el amor por los perros, las mascotas en general y quizás pueda generar conciencia sobre el trato animal.

Una bonita película para toda la familia, con una hermosa estética y agradables momentos que los hará sonreír al salir del cine.