La Opera Prima de Alexmir Dordelly no se anda con pequeñas, y lo demostró en su estreno, el pasado 23 de abril, en las salas de Cines Unidos, donde nos demostró que el terror y el thriller siempre tendrá cabida en el cine venezolano.
El metraje
nos muestra a un grupo de mujeres que se juntan para celebrar la despedida de
soltera de una de las integrantes, quien está a punto de vivir una de las
experiencias más brutales de su vida, pues, más temprano que tarde, son abordadas
por un grupo de hombres enmascarados, armados a más no poder, en busca de
dinero que, al no cumplir su cometido, someterán a estas jovenes a un calvario.
A primera
vista, el filme resulta atractivo y muestra una proligidad en las escenas,
además de la gran aparición de la conocida agrupación criolla, Rawayana, con su tema SÁDICO, como
parte de la musicalización de la película que, a nivel de música y sonido, no
deja nada que desear.
Más
adelante, para mala fortuna, el espectador no puede evitar notar lo alargada
que se torna la narrativa, resultando en una experiencia fatigosa en las
primeras escenas, que luego se ve ahogada por acción de la buena, mostrando uno
de los desenvolvimientos más sanguinarios de película venezolana alguna,
quedando grabada en la retina del que observa.
Asimismo, no nos quedamos solo con la experiencia más
superficial, pues, Despedida de Solteras,
nos desarrolla una crítica social que nos hace conscientes de la vulnerabilidad
del usuario ávido de redes sociales, que se expone a un mundo de beneficios,
pero tambien a terribles males, como problamática recurrente de la
contemporaneidad; es este el discurso que maneja, y aborda el consumismo y el
exceso de la modernidad, a través de este suspense de cocción lenta.
Para más
detalle, la cinta debut de Dordelly, además de continuar con la amplia lista de
largometrajes venezolanos memorables, rompe records al relatar que su productó
tuvo 9 días de rodaje, luego de varios años de madurar este proyecto de cine
independiente que no dejó indiferente a nadie.
En resumen
La narrativa, que recoge elementos del Slasher y el Body Horror,
deja a la espera de una secuela, dejando a la vista variados cabos sueltos, a
la espera de ser resueltos por una futura nueva entrega, de cuyo desarrollo no
se conoce hasta esta instancia.
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