Cuando este año culmine, el cine venezolano podrá contar
entre sus producciones con las películas que se desarrollaron bajo el Programa
“Aprender haciendo” del Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC). La
propuesta que inició con la reactivación del convenio entre la Universidad de
Los Andes (ULA) y el ente rector del cine, se transformó en un espacio de
formación extraordinario para los jóvenes cineastas que participaron en los
tres largometrajes que alistan su estreno en las salas de cine nacional.
Se trata de un espacio de aprendizaje destinado a fortalecer
las áreas de guion, producción y dirección cinematográfica, que logra enlazar a
estudiantes de todo el país con algunos de los directores más reconocidos del
cine venezolano.
Para el CNAC, la experiencia del programa “Aprender haciendo”
representa un aporte invaluable para una nueva generación de cineastas que obtienen un importante caudal de experiencia desde el sitio de rodaje
de películas como “Julia” del cineasta venezolano José Antonio Varela, que
contó con la participación de 20 estudiantes y “Machera, el de la corte de los
caballeros” de Jackson Gutiérrez (22 alumnos de pre-grado). Ambas producciones
integraron estudiantes de la Universidad Experimental de las Artes (UNEARTE),
así como de la ULA y de la programación anual de los Talleres CNAC.
“Historias de familia, amor y muerte” del convenio con la
Escuela de Medios Audiovisuales (EMA) de la ULA, consta de ocho episodios que alternan la angustia, la
pérdida y el sacrificio y en ella trabajaron 60 alumnos de diferentes semestres,
que incluían los trabajo de grado: “Deriva” de Héctor Asuaje, “Guaichía” de
Andrés Ortíz, “La Milagrosa” de María de Ángeles Pernía, “Linda Balinda” de
María Daniela Guevara, “Luna roja” de Erika Rodríguez, “Manos de sangre” de
Ramón Vega, “Piedras cayendo por la ladera” de Oliver Zambrano y “Vigilaré” de
Arantxa Valecillos, integran este largometraje que fue rodado en Mérida y marcó
el inicio de este modelo de trabajo que permite optimizar el uso de recursos
destinados al cine nacional.
Esta experiencia de formación que abarca las primeras tres
producciones del programa “Aprender haciendo” ha beneficiado a 102 estudiantes
universitarios que cursan sus estudios de cine en diferentes universidades el
país.
Programa en expansión
En la actualidad, el Programa “Aprender haciendo” prevé la
ampliación del número de proyectos que recibirán apoyo financiero a través de
esta modalidad. La propuesta que garantiza la participación de estudiantes
universitarios en nuevas producciones venezolanas, estudia la incorporación de
proyectos cinematográficos que serán analizados en el Comité Ejecutivo del
CNAC.
Esta iniciativa que logra conectar a jóvenes del país con la
experiencia de rodaje y producción cinematográfica, ha obtenido resultados
favorables para todos los sectores involucrados, en especial a para los
cineastas en formación y las casas de estudio de educación superior que
participan.
El Centro Nacional Autónomo de Cinematografía estima que, a
final del año 2023, los proyectos de formación convertidos en escuelas de campo
para el cine nacional, alcanzarán a través del Programa “Aprender haciendo”,
nuevas cifras de crecimiento para un sector en franca recuperación. El número
de proyectos a futuro incluye las películas “El Hombre de la Luz”, de Christian
Márquez en alianza con la UNEARTE- Mérida y “La última noche más oscura” del
realizador Alexmir Dordelly.
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