DEUS IN ABSENTIA: MALDICIÓN
DEUS IN ABSENTIA; MALDICION es el último trabajo del director español Joel D.Hitos, próximo a estrenarse. Es un cortometraje precuela de su anterior trabajo “Deus in Absentia; La Ausencia de Dios”, estrenado en el 2020 y que se centra en los orígenes del mal encarnados por un libro.
Joel D.Hitos nos narra historia que transcurre cinco años antes de lo que
acontece en su anterior cortometraje; donde el profesor de teología Cecilio (Ricardo
Pastor) especializado en demonología, acude a la casa de Ana (Valentina Bravo),
una joven desesperada por encontrar ayuda y socorro a la difícil situación que padece su
hermano Carlos (Samuel Romero), que desde hace unos días ha cambiado
radicalmente su conducta a tal punto de que ningún método convencional por vías
de la ciencia han ayudado a mejorar los síntomas.
Cecilio que de primer momento nos da la impresión y esperanza de que puede controlar la situación, pero
pronto da una vuelta a la trama y se topa
con el caso más difícil que jamás ha enfrentado a tal punto de usar el
exorcismo, quien cuenta con experiencia solo por vocación, esta vez de topa con
un peligro mucho mayor que nunca había visto y el cual tendrá que enfrentarse…
Atmósfera del cortometraje
El realizador nos introduce de primer momento al tono de terror del
cortometraje con la narrativa circular del exorcismo que realiza su
protagonista Cecilio para luego envolvernos en la intriga y drama justo en el
momento en el que Ana va narrando y explicando los extraños síntomas que padece su hermano Carlos. El profesor Cecilio analiza la situación buscando el control; pero que pronto
nos vamos adentrando en una historia cargada de matices terroríficos, planteándonos
una lucha entre el bien y el mal que tiene que ver sobre todo con la propia
condición humana con tema del odio como tema pieza angular y los Dogmas
demoniacos de una secta en los que está
sumergido Carlos y a la cual abre las puertas para qu la trama se desarrolle a
puntos más complejos.
El corto a momentos nos hace simpatizar con Cecilio al mostrarnos la
fragilidad como cualquier persona a la que tiene que enfrentar; miedos, deseos
y el difícil exorcismo al cual tiene que someter a Carlos y con el crucial rol
que la religión o la espiritualidad –o la ausencia de ellas cuando el odio es
engendrado por fuerzas demoníacas, y jugando la decisión de mantenerse firme gracias a la figura clave
de ese mentor que hace que nunca pierda
el valor y la fe para continuar, mientras Ana (con una interpretación un poco
floja), nos muestra la desesperación de una hermana inocente que parece perdida
al no sabe qué hacer o cómo actuar en muchos de los momentos del film.
Apartado visual
Con un estilo visual bien definido dentro del género de terror y fantasía,
la puesta en escena in crescendo, y la composición y fotografía que nos lleva a
un ritmo al principio inquietante con
colores pasivos para luego transformarse
en momentos terroríficos y sorpresivos
cargados de rojos, y tonos fríos que nos transmiten intensidad combinados con unos efectos
de iluminación logrando generar el ambiente de oscuridad del ente maligno acompañados
con música, entre rock, misterio, terror,
y efectos de sonido sutiles pero perturbadores, sumergiéndonos en la lucha entre
Cecilio como protagonista y figura representando el bien y la fe, ante este ente sobrenatural como símbolo de
descomposición y deterioro del ser humano ante la maldad generada por el odio
desmedido provenientes de un dogma.
En resumen
El realizador nos narra interrogantes mientras juega con el
miedo propio del género estremeciéndonos a través de la pantalla; ¿Es el odio
desmedido parte del propio ser Humano? ¿O son estas fuerzas sobrenaturales
demoniacas las que gobiernan a Carlos, origen del mal que lo conduce al odio
desmedido? Son 29 minutos que vale la pena observar para que todos los
espectadores juzguen por sí mismos y saquen sus propias conclusiones.
Redactado por Mauricio Infante
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