Frankenstein (1931)

 

"Una obra que sigue siendo relevante y fascinante para las audiencias contemporáneas"

Inspirado en el libro “Frankenstein” o “El moderno Prometeo” de Mary Shelley de 1818; Frankenstein de 1931 es una película de terror gótico producida por Universal Pictures y dirigida por James Whale, producida por Carl Laemmle y su guionista Francis Edward Faragoh junto a Garret Fort. Junto a diferentes departamentos como el de fotografía, dirigido por Arthur Edeson, en el maquillaje a Jack Pierce y sus protagonistas:

  • Boris Karloff como el Monstruo de Frankenstein. 
  • Colin Clive como Dr. Henry Frankenstein. 
  • Mae Clarke como Elizabeth (la novia de Henry).
  • John Boles como Victor Moritz
  • Edward Van Sloan como Dr. Waldman
  • Frederick Kerr como Barón Frankenstein
  • Dwight Frye como Fritz
  • Lionel Belmore como Herr Vogel
  • Marilyn Harris como La pequeña Maria.

Aunque no ganó premios en su momento, Frankenstein ha sido objeto de aclamación y crítica a lo largo de los años y ha sido incluida en listas de las mejores películas de terror de todos los tiempos. Este film ha tenido un gran impacto en la cultura popular y su contribución al género del cine de terror.

Sinopsis

Frankenstein es un doctor que decide llevar a cabo un experimento: darle vida a un ser construido a partir de restos de cadáveres. Su fiel ayudante Fritz será su aliado en el proyecto y, con su ayuda, se adentran en los cementerios cercanos para conseguir la materia prima. Lo que el doctor no sabe es que el cerebro que utilizado pertenecía a un criminal, condenando al monstruo al odio.

Frankenstein de 1931 fue todo un fenómeno cinematográfico siendo en su momento aceptada como una gran película ocupando puestos relevantes en diversos listados de clasificación de mejores películas o mejores cintas de terror y tiene una historia de censura bastante llamativa haciendo así que el gobierno de Kansas solicitara la eliminación de 32 escenas de la película, que siendo una cinta de 70 minutos se concluía en eliminar la película.

Mary Shelley y el Moderno Prometeo

Un aspecto muy importante de la historia de esta película, es que se inspira en el libro de Mary Shelley “Frankenstein” o “El Moderno Prometeo” publicado en el año 1818. Tratándose sobre un joven estudiante científico que se obsesiona con la idea de infundir la reencarnación de la vida con sus propias manos, basándose en otros contextos que en la película no hacen presencia. Por este motivo la película no está al 100% inspirada en esta obra literaria, pero, Universal, encargada de la producción adquirió los derechos de la adaptación teatral de la obra original adaptada por Peggy Webling.

Lo positivo de esta obra es lo visualmente atractiva que puede resultar a la hora de verla. Dos de los sentimientos que se pueden expresar en dicha obra es ese romanticismo y la calma que transmite mientras va transcurriendo la película, aun siendo que no está completamente inspirada en el libro, ya que en el libro sí se puede expresar directamente este tipo de sentimientos, es decir, que aun así se dio a notar un gran factor que los conecta como obra literaria y cinematográfica.

Asimismo lleva consigo una gran conexión con lo gótico, desde los espacios, la iluminación (sobretodo iluminación ya que en esta película no se muestran escenas a color debido a la época.) dándole un aspecto retorcido y oscuro que le genera mucha personalidad, por lo que todo lo que se encuentra en la escenografía realmente hace una ilusión muy buena.

Comparaciones entre la obra literaria y el film

Aun así, por la falta de conexión con el libro, como por ejemplo que en la obra literaria el protagonista tiene por nombre Victor Frankenstein, y en la película se le conoce como Henry Frankenstein, el ayudante jorobado Fritz no tenía alguna aparición en el libro, pero el mejor amigo, que sí llevaba por nombre Henry Clerval, en esta ocasión era Victor Moritz, siendo así que la relación de ambos en la película no se le muestra ese cariño genuino de amistad que ambos tenían. Igualmente, un aspecto negativo de la obra fue el desenlace romántico que tenían Victor Moritz con Elizabeth, la futura esposa de Frankenstein, mostrando sentimientos de amor romántico por la futura esposa de su colega, cosa que, como ya se mencionaba antes, no estaba reflejada en el libro.

Se considera común que a la hora de inspirar este tipo de películas sacadas de libros, no se le mencionen ciertas situaciones que transcurren en las páginas de un libro, llevándolo incluso a la modificación de guion, agregando más personajes, eliminando o simplemente agregándole algún cambio dentro del desarrollo en general. Pero, aun así, siendo que la obra está inspirada de igual manera de una obra de teatro, no estaría de más la relación más importante y esencial que es la del libro de Mary Shelley. A comparación de la obra cinematográfica de Frankenstein del año 1994 que se mantiene bastante fiel al libro y aun así no tuvo el mismo impacto que la del año 1931. Pero el basarse en el libro le dio más fidelidad en la historia que la versión de 1931.

Como siguiente punto pueden ser las comparaciones de actores que protagonizaron esta obra. Desde un punto de vista de gustos, la de 1931 protagonizada por Boris Karloff, que como punto negativo por el departamento de dirección de arte, en el caso de los maquillistas y esos efectos visuales que se pudieron agregar, no le dieron la vivacidad del icónico experimento de Frankenstein, deforme, esa falta de caracterización ha llevado al contrario la idea del ser aterrador que se suele ver. En el caso de la iluminación (a pesar de que por la época no estaba a color la película) favorecía en muchos aspectos, como para marcar las facciones del monstruo, sus expresiones, y demás.

Uno de los aspectos más importantes dentro de la película fue su banda sonora, que estaba compuesta por melodías que son capaces de introducirte en el momento exacto en que transcurre una escena; mostrando el terror, el misterio y muchas más emociones dentro de la película. Dentro de las posibilidades y logros que pudo obtener este film, tuvo un buen manejo de perspectiva a la hora de mostrar la historia, ya sea porque no seguía al pie de la letra lo que realmente sucedió en el libro con el fin de darle un valor diferente, para quién le haya sido de buen gusto o agrado esta película (como en mi caso) obtendrá una buena crítica.

Para ser una obra cinematográfica inspirada del libro y por consiguiente de una obra teatral, se puede considerar un trabajo bien realizado, aun teniendo puntos en los que con el paso del tiempo con opiniones críticas se pudo mejorar, y gracias a las comparaciones de diferentes obras cinematográficas, sigue siendo un gran clásico. El trabajo de James Whale como director de diferentes filmografías como: El caserón de las sombras, El hombre invisible y más. Whale utilizó técnicas cinematográficas innovadoras para crear un sentido de suspenso y horror, incluyendo ángulos de cámara inusuales, iluminación expresiva y una edición efectiva. Además, su habilidad para trabajar con actores fue notable, especialmente en la icónica interpretación de Boris Karloff como el monstruo de Frankenstein.

En resumen

La película de Whale no solo se destaca por su impacto visual y su atmósfera, sino también por su exploración de temas más profundos como la humanidad, la ética científica y la alienación social. Estos elementos elevan a Frankenstein más allá de ser simplemente una película de terror y la convierten en una obra que sigue siendo relevante y fascinante para las audiencias contemporáneas.

Whale demostró su desempeño como director en Frankenstein dejando un legado duradero en la historia del cine de terror y estableciendo un estándar para futuras películas del género.


Artículo de Andrea Vallenilla

Diagramación: Luis Ortega

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